Cuando nos dedicamos al Derecho de Familia, que no es sino la regulación de las relaciones de personas con vínculos familiares en donde surgen controversias, vemos con frecuencia que el coste de la litigación entre parientes excede de lo económico y pasa factura a todos los intervinientes: a las partes en conflicto, que obtienen un desgaste que puede hacer muy difícil restablecer las relaciones personales en el futuro; a la Administración de Justicia, que dedica importantes medios personales y económicos para poder tomar las decisiones que los familiares no pueden o no quieren alcanzar; y también a los abogados, que dedicamos muchas horas para estudiar y ayudar a nuestros clientes sin que la contraprestación económica, en términos simplemente económicos, permita cubrir el tiempo, recursos y esfuerzo dedicados.

Cada vez más se viene presentando la mediación familiar como método alternativo de resolución de conflictos que se basa en los principios de voluntariedad, transparencia, y respeto mutuo, que se desarrolla en un ámbito no-terapéutico, donde el mediador facilita un acuerdo alcanzado por las partes y que está basado en optimizar los pactos a los que las partes están dispuestas a llegar por el beneficio mutuo. A diferencia del proceso judicial contencioso, donde es un tercero investido de autoridad (el Juez) quien decide la controversia, en la mediación son los propios interesados quienes, poniéndose en el lugar del otro serán capaces de alcanzar una solución satisfactoria al conflicto.

En Patiño Abogados contamos con profesionales con formación y experiencia en mediación familiar, que ponemos a disposición de aquellas personas dispuestas a tomar las riendas e involucrarse con el objetivo de que un buen arreglo es más rápido, más beneficioso y también más barato que cualquier pleito.